sábado, 25 de mayo de 2013

ENTRADA 3. Rechazo de la homosexualidad en la sociedad.

María Santamaría Chamorro
A1. Homofobia


EL RECHAZO DE LA HOMOSEXUALIDAD EN LA SOCIEDAD. HOMOFOBIA


ENTRADA 3: 

En esta tercera entrada voy a realizar una síntesis sobre cuáles son los principales ámbitos en la vida de una persona homosexual en los cuales su vida cotidiana se puede ver afectada por el hecho de pertenecer al colectivo LGTB. Los voy a dividir en cuatro apartados diferentes:

- Dificultades para la aceptación propia de la orientación sexual o identidad de género. 

Todos los niños desde pequeños, aprenden que los chicos tienen que jugar con cochecitos y las chicas con muñecas, que de mayores se casarán con una persona de su sexo opuesto y formarán una familia feliz. 

Las personas homosexuales no reciben una educación diferente a las heterosexuales, luego en su crecimiento, en el momento en que comienzan a sentir atracción por personas de su mismo sexo, empiezan a desarrollar un proceso de autoaceptación que en ocasiones resulta muy difícil y lleva incluso al propio rechazo de su condición, ya que se tiene que luchar contra la interiorización de la homofobia que la persona ha aprendido desde niño.

- Dificultades relacionadas con la aceptación de la orientación sexual por parte del entorno familiar.

Desde el momento de la revelación a los padres de la orientación sexual o la identidad de género de su hijo/a, éstos van a comenzar un proceso de aceptación de su realidad como padres y madres de una persona homosexual o transexual muy parecido al que pasan los propios LGTB. La primera reacción de los padres suele ser creer que su hijo está confundido, que no es homosexual sino que es algo pasajero y en ocasiones se suele pensar que con ayuda profesional se podría “curar”, no siendo ésta más que una prueba de lo presentes que están los prejuicios sociales. 

Para los padres no suele ser un proceso fácil, ya que a parte de todas las ideas propias que ellos poseen, también entra el miedo que éstos sienten a que su hijo sea excluido o rechazado socialmente, no quieren que su hijo sufra y por tanto no terminan de aceptar su homosexualidad. Sin embargo la mayoría de los padres terminan por despojarse de esos estereotipos y pasan a asumir el papel de “padres de una persona LGBT”, rompiendo con las expectativas que se tenían hacia el propio hijo anteriormente. 

Aunque en ocasiones, también se dan los casos en que los padres recurren a terapias o a charlas con profesionales e incluso sacerdotes para intentar redireccionar a su hijo hacia la heterosexualidad. En otras ocasiones extremas y en las menos, (en una sociedad occidental) los padres deciden tomar por muerta toda relación con su hijo LGBT.

- Dificultades de aceptación de la homosexualidad en los entornos educativos.

Hay que tener en cuenta que en la actualidad existe la creencia de que las generaciones más jóvenes son más tolerantes en el ámbito de la diversidad sexual. Según esta afirmación los adolescentes deberían mostrarse más abiertos y deberían tener menos conductas discriminatorias que aquellas personas de más edad que han sido educadas según modelos más tradicionales, sin embargo, la realidad no podría estar más alejada de esta afirmación. 

En los centros educativos, la homofobia y la transfobia campa a sus anchas. Uno de los estudios más recientes realizados en España sobre el tema “Homofobia en el Sistema Educativo” realizado por COGAM (asociación LGTB de Madrid), ofrece datos interesantes sobre las actitudes homófobas de nuestros jóvenes. En resumen, casi el 21% de los jóvenes no se siente cómodo a la hora de relacionarse con otros adolescentes LGTB; en torno al 34% no está de acuerdo con la expresión de sentimientos en público por parte de estos; el 15% cree que es correcto tratar de forma despreciativa a una persona homosexual; y finalmente cerca del 75% cree que los homosexuales son discriminados en el instituto.

Las consecuencias sobre las personas LGTB son claras. Muchos de ellos se sienten aislados de su grupo de iguales y carecen de redes sociales. Para los adolescentes la homosexualidad es algo difícil de entender y la transexualidad puede parecer algo bajado casi como de otro planeta, por eso en muchas ocasiones la burla, el aislamiento y el acoso se convierten en prácticas habituales. Los jóvenes homosexuales, en ocasiones se ven totalmente marginados de su entorno escolar, no pueden relacionarse con los demás compañeros y reciben mofas y abusos diarios por su orientación sexual, lo que les puede afectar gravemente en su carácter, convirtiéndolos en niños introvertidos, reservados y desconfiados de cara a la sociedad. 

La tortuosa vivencia que para muchas personas LGTB significa su proceso formativo les lleva habitualmente a un abandono prematuro de sus estudios como forma de huir del acoso diario que suelen sufrir. Estos abandonos prematuros tendrán graves consecuencias para ellos a la hora de insertarse laboralmente a medio o largo plazo y conformarán un grave factor de exclusión para ellos.

- Dificultades de aceptación de la homosexualidad en los entornos laborales.

No todas las personas homosexuales aceptan su orientación sexual y la integran de forma positiva en su vida cotidiana, por tanto, a la hora de visibilizarse como tal, pueden experimentarlo como algo vergonzoso o doloroso y optar por mantenerse escondidos. Esto puede tener graves consecuencias tanto desde la perspectiva individual (sentimiento de soledad, incomprensión, de no pertenencia al grupo, etc.), como en su relación laboral con sus empresas, ya que tareas sencillas como pueden ser la solicitud de permisos por enfermedad del cónyuge, vacaciones por celebración del matrimonio o permisos de maternidad o paternidad, entre otras, pueden ser experimentadas como tareas imposibles de asumir. En ese sentido el entorno laboral y la cantidad de homofobia existente en él puede venir a complicar aún más este proceso. 

Si una persona homosexual aún no ha “salido del armario” en su trabajo porque no ha terminado de integrar satisfactoriamente su orientación sexual o porque no tiene la suficiente confianza como para hacerlo, y experimenta diariamente comentarios o conductas homófobas, sentirá un intenso miedo a ser visible, reforzándolo en el hecho de ocultarse. Por tanto la homofobia en los entornos laborales tiene que ser considerada como un riesgo laboral específico para los LGTB ya que mediatiza su salud laboral y personal.

                        

* Recomiendo hacer una visita a la página http://www.cogam.es/, en ella podemos encontrar muchísima información sobre la homosexualidad. Noticias, consejos, vídeos y testimonios tanto para personas homosexuales y su entorno o para gente simplemente interesada en el tema.

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